El domingo primero de abril inicia el Cambio de Horario de Verano (CHV) en la República Mexicana, salvo en 33 municipios de la franja fronteriza norte, que adoptaron el horario estacional tres semanas antes.
Por ello se recomienda a todas las personas que el próximo sábado 31 de marzo, antes de irse a dormir, adelanten una hora los relojes, para que al día siguiente reanuden sus actividades con el nuevo horario.
En el mundo, actualmente 86 países han adoptado el CHV. Esta medida consiste en adelantar una hora el reloj durante la parte del año en que se registra mayor insolación, a fin de reducir el consumo de energía eléctrica, ya que la aplicación del horario estacional reduce, diariamente, una hora la demanda máxima de electricidad.
En 2011, la aplicación del CHV en México permitió un ahorro en el consumo de 988.76 GWh, equivalente al 90% de las ventas anuales de energía eléctrica para el Estado de Campeche el año pasado. Referente al ahorro económico obtenido por la implementación y puesta en marcha del CHV, el año pasado se estima que fue de mil 35 millones de pesos.
Esta cifra incluye los ahorros obtenidos en los 33 municipios de la franja fronteriza norte, que adoptan el CHV el segundo domingo de marzo y concluyen el primer domingo de noviembre, con el propósito facilitar la vida cotidiana de los residentes locales, que tienen que cruzar de un lado a otro de la frontera ? todos los días ? por motivos laborales o escolares.
La demanda evitada por la aplicación del CHV en 2011, de 800 MW, equivale a diferir una inversión de 7, 500 millones de pesos, suficiente para construir una planta de ciclo combinado de esta capacidad.
Cabe precisar que el porcentaje de ahorro familiar por la aplicación del CHV, en 2011, tiene una relación directa con los hábitos de consumo y el número de focos con que cuenta el domicilio.
Si se considera que gran parte de la energía eléctrica que consume el país es generada mediante combustibles fósiles, con el CHV se evitó el año pasado la quema 1.76 millones de barriles equivalentes de petróleo. Con los ahorros de energía eléctrica obtenidos por el CHV, se evitó también la emisión a la atmósfera de 659 mil toneladas de bióxido de carbono.
Los ahorros acumulados por la aplicación del CHV desde su inicio en 1996 a la fecha, permitieron dejar de consumir 18, 419 GWh y se evitó la quema de 40.63 millones de barriles de petróleo y se han dejado de emitir 24.32 millones de toneladas de bióxido de carbono a la atmósfera.
Con la idea de dimensionar el significado del ahorro de energía acumulado de 1996 a la fecha por la aplicación del CHV, éste sería suficiente para alimentar 91.42 millones de lámparas ahorradoras, de 23 watts, operando las 24 horas del día todo el año.