Washington.- Tras los disturbios en Baltimore, Maryland, y mientras proliferan en Estados Unidos casos de violencia policial, el presidente Barack Obama presentó hoy una propuesta para limitar el uso equipamiento militar por las fuerzas de orden público.
Durante un discurso en Camden, Nueva Jersey (noreste), el mandatario abogó por reformas que pongan límites a la adquisición de cierto armamento -como lanzagranadas o armas y municiones de calibre 50 o superior- a fin de promover la confianza entre los cuerpos policiales y las comunidades.
«Hemos visto cómo el equipamiento militar a veces puede dar a la gente la sensación de que hay una fuerza de ocupación en vez de una que es parte de la comunidad y que los está protegiendo y sirviendo», dijo Obama desde una localidad atrapada hasta hace unos años en la «espiral descendente» de la violencia.
Ahora los índices delictivos han bajado en Camden -suburbio de Philadelphia- , tras reformas en su fuerza policial.
La iniciativa de Obama se produce mientras se da un debate nacional sobre la necesidad de una reforma de los cuerpos de seguridad y el sistema judicial, luego de una serie de muertes de afroamericanos a manos de la policía y de la reciente explosión social producida en Baltimore a raíz del deceso bajo custodia del joven negro Freddie Gray.
Obama criticó la situación de «comunidades aisladas y segregadas, sin oportunidades y sin inversión y sin empleo» para niños y adultos, y opinó que no puede pedirse a la policía que resuelva los problemas mientras no se revierta esa situación.