Académico de la BUAP destaca beneficios de programa de apoyo a discapacitados

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El programa de apoyo integral a personas con discapacidad implementado en la Facultad de Administración de la BUAP es pionero en México y América Latina, aseguró Leobardo de Jesús Vargas Vallejo, coordinador del programa «Sin Barreras» de esta unidad académica.

Vargas Vallejo, quien con apoyo del director de la Facultad, Ricardo Paredes Solorio, puso en marcha dicho modelo implementado en Europa por la Universidad Complutense, aseguró que el objetivo es que pueda replicarse en todas las unidades académicas de la Institución.
Tras señalar que a la fecha hay más de 40 alumnos con discapacidad en la BUAP y 8 en la Facultad de Administración, informó que en los últimos tres años se han desarrollado importantes acciones, en primer lugar se realizó un diagnóstico sobre tipos de discapacidad, necesidades y requerimientos para su atención.
En segundo lugar se acondicionó con rampas la planta baja de la Facultad, además de fomentar la corresponsabilidad de toda la Universidad, para ello, a los alumnos que toman clase en silla de ruedas se les programan sus clases en la planta baja a manera de facilitarles el ingreso, y en caso de que deban ir a otros edificios se hace la gestión y acompañamiento en caso de ser necesario.
El Coordinador de «Sin Barreras», explicó que además se promueven becas a través de la Dirección General de Servicios al Estudiante, debido a que vivir con una discapacidad implica costos adicionales, como sistemas braille, uso de papel especial, grabadoras y computadoras adaptadas.
Asimismo indicó que se ofrecen apoyos psicológicos y de estrategias académicas para la mejora de sus procesos de aprendizaje, «hay dos ex alumnos en la bolsa de trabajo de la Universidad y se desarrollan gestiones con dependencias de gobierno como el Sistema DIF para generar acciones que impulsen desde fuera de la Facultad sus necesidades».
Vargas Vallejo refirió que en México existen pocos espacios y acciones aisladas de atención a discapacitados, y aseguró que no existe un programa integral como el que se aplica en la BUAP ni en el país, ni en países de América Latina.
«Estos tres años de trabajo han generado interés de otras áreas de la universidad y dependencias, por lo que Administración seguramente será un modelo y punta de lanza para poder replicar esto en todas las unidades académicas».
Por otra parte lamentó que no existan suficientes plazas de empleo en el país para este sector al que le cuesta mucho insertarse a la vida laboral, además de que del 10 a 12 por ciento de la población que tiene alguna discapacidad menos del uno por ciento es profesionista.
Señaló también que a pesar de la existencia de programas de condonación de impuestos de nomina a quienes emplean discapacitados o la posibilidad de acceder a recursos del ramo 33 a través de ONG’s poca gente los usa o conoce el procedimiento.
«Hace 15 o 16 años me tocó acompañar a una ONG a generar este tipo de trámites del ramo 33 y veíamos como muchas instituciones no sabían armar los proyectos y mucho dinero se regresaba, porque no había instituciones adecuadas o que sustentaran el recurso por ello se perdía».
Concluyó que el apoyo integral a estos grupos permitirá eliminar gradualmente las barreras de la discriminación y les ofrecerá las mismas oportunidades, de ahí el beneficio de que desde una institución pública como la BUAP se impulsen estos programas de impacto social.