La existencia de un equipo técnico interdisciplinario que se comprometa a acompañar los procesos de organización y educación social, administración y contabilidad, permitirá establecer una cadena agroindustrial que garantice a los campesinos incrementar su productividad y asegurar la comercialización de sus productos, expresó Raúl Hernández Garciadiego, ganador de Iniciativa México 2010.
Al participar en el Segundo Encuentro Agroindustrial y Primer Congreso de Agroindustria, que organiza la Unidad Regional de Acatzingo de la BUAP, expuso que para poder lograr este fin «por un extremo está la regeneración ecológica de la naturaleza para que haya retención de agua y recarga de acuíferos y así tener agua disponible en riegos de emergencia».
¿Cómo conservar, mantener y limpiar el agua? Para ello «nos inspiramos en técnicas prehispánicas como el uso de terracerías en los cerros, que se complementaron con otros materiales de construcción moderna como el concreto».
Los campesinos además de considerar la opción anterior, otra estrategia que implementarían es la formación de cooperativas locales, «que permiten tener acceso a insumos, equipo y asistencia técnica para incrementar cada año su capacidad productiva».
El siguiente eslabón es la agroindustria donde se genera valor agregado y empleos formales permanentes para las familias que participan en las cooperativas.
En su conferencia «Incrementar la seguridad hídrica y alimentaria para combatir la pobreza», dijo que un tercer componente es «un eslabón comercial que establezca relaciones adecuadas y amigables, así como una educación en el consumo consciente para que la gente sepa que no sólo se obtienen alimentos sanos, sino que éstos contribuyen a que se mantengan las cadenas productivas».
El director general de Alternativas y Procesos de Participación Social A.C., indicó que la propuesta «Agua para siempre», con la que participó en Iniciativa México 2010, se originó con el objetivo de atender las carencias de la población, es decir, el 80 por ciento de los mexicanos.
Un proyecto más de esta asociación es «Quali», la producción de diferentes alimentos de amaranto y que comprende a más de 100 productores y cuya meta es introducir consumibles que combatan la obesidad.
Estos son ejemplos de que los proyectos a favor de los ciudadanos en México son posibles, por lo que invitó a los asistentes a «enfrentar los problemas con equipos interdisciplinarios, puesto que se requieren jóvenes emprendedores y cooperativos con un objetivo en común», finalizó Hernández Garciadiego.